Incendio forestal en el Sur de California provoca evacuaciones y afecta a instalaciones adventistas
El sur de California llevaba más de una semana luchando contra avisos de calor excesivo cuando la situación desencadenó un incendio forestal el 5 de septiembre y llegó a su punto álgido el sábado 7, lo que llevó al gobernador Newsom a declarar el estado de emergencia en el condado de San Bernardino. California obtuvo una Subvención de Asistencia para la Gestión de Incendios (FMAG) de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) para ofrecer provisiones y medidas de evacuación.
El domingo 8 de septiembre, el Line Fire se intensificó, provocando un calor récord, y continuó hasta el lunes por la mañana, cuando el fuego se contuvo en un 3%. El informe inicial de incidentes del Departamento de Protección Forestal y contra Incendios de California indica que 36.328 estructuras se vieron amenazadas, con 211 camiones de bomberos y 1.855 efectivos para combatir las llamas. El fuego sigue ardiendo fuera de control, consumiendo 23.600 acres de terreno en el condado de San Bernardino. Se espera que las temperaturas, que han sido de tres dígitos durante la última semana, desciendan hasta los 90 grados y vuelvan a subir hasta los cientos de grados a mediados de semana, con algunas brisas ligeras que podrían ampliar el alcance del incendio.
El distrito escolar del condado ha optado por cerrar las escuelas hasta el martes en respuesta a las condiciones inciertas. Por el momento se desconoce si la Universidad de Loma Linda, situada en el condado de San Bernardino, se verá afectada por estos cierres. Muchos residentes adventistas de la zona han informado de la presencia de humo, y algunos de los que viven en las montañas han tenido que ser evacuados. Camp Cedar Falls, un campamento de verano de la Asociación del Sur de California, ha tenido que ser evacuado. Estamos a la espera de una respuesta del presidente de la Asociación sobre el estado de la zona y de las iglesias.