Comprar y vender la salvación

El dinero. Todos lo necesitamos. No podemos vivir sin dinero. Pero, ¿qué harías si tu tarjeta de crédito dejara de funcionar y las tiendas se negarán a aceptar tu dinero en efectivo? ¿Cómo sobreviviría?

El miedo de los cristianos a esto tiene su origen en Apocalipsis 13, que describe una bestia que sale de la tierra con cuernos de cordero y habla como un dragón. Esta bestia aterradora realiza señales y maravillas sobrenaturales, incluso hace bajar fuego del cielo a la tierra. Innumerables millones de personas se ven atraídas por este despliegue de poder satánico y aceptan voluntariamente “la marca de la bestia”.

Según la interpretación popular, esta marca les asegura la supervivencia y les permite seguir comprando y vendiendo. Los seguidores de Jesús se niegan a aceptar esta marca y son inmediatamente expulsados de los sistemas financieros del mundo. Tarjetas de crédito, tarjetas de débito, dinero en efectivo, acciones, criptodivisas, NFTs… todos carecen de valor.

En su desesperación, racionan sus reservas de frijoles enlatados y tratan de cultivar tantas verduras en sus patios como sea posible. Los pepinos y las espinacas nunca han tenido tan buen aspecto.

Pero sus provisiones se agotan poco a poco y empiezan a pasar hambre. “Prepárense para el fin de los tiempos”, clama el evangelista. “¡Cuidado con la marca de la bestia!”, proclama el pastor, “¡porque llegará un momento en que al verdadero pueblo remanente de Dios no se le permitirá comprar ni vender!”.

Fe, no tarjetas de crédito

Este es un escenario aterrador, pero ¿es realmente lo que enseña la Biblia? Cuando Jesús reveló el futuro al apóstol Juan, ¿intentaba realmente advertirnos sobre la comida y las finanzas, o de algo más importante?

El Dr. Ranko Stefanovic, profesor de Nuevo Testamento en la Universidad Andrews, sugiere en su libro La Revelación de Jesucristo (Berrien Springs: Andrews University Press, 2009) que mientras los pastores y evangelistas suelen interpretar la frase “comprar o vender” literalmente, y pasan a describir un mundo apocalíptico sin tarjetas de crédito, que el contexto figurado de Apocalipsis 13 exige una interpretación figurada.

Apocalipsis 18 describe a “los mercaderes de la tierra”, un grupo que se ha enriquecido gracias a sus negocios con Babilonia, un sistema religioso que compite con la verdadera religión de la Biblia. En el juicio de Babilonia (Apocalipsis 18:9-20), estos “mercaderes” “lloran y se lamentan” porque no les queda nadie que “compre” su “mercancía”.

¿Quiénes son estos mercaderes, y qué mercancía son ahora incapaces de vender? Stefanovic escribe,

“Los mercaderes” de Apocalipsis 18 son los vendedores comerciales figurativos de Babilonia que venden y distribuyen la mercancía espiritual de sus doctrinas y políticas corruptas [de Babilonia].

Estos mercaderes no están vendiendo televisores y refrigeradores a los católicos y prohibiendo las ventas a los adventistas. Según el Comentario Bíblico ASD (Volumen 7, p 861) estos mercaderes están vendiendo religión falsa, doctrinas corruptas, prácticas religiosas torcidas, y un camino de salvación falsificado.

Si usted pensó que su tarjeta de crédito dejó de funcionar era aterrador, ¡esto debería ser infinitamente más aterrador!

¡Sólo teología autorizada!

Llegará un momento en que sólo aquellos que estén oficialmente autorizados por el sistema babilónico podrán enseñar religión. Estos pastores, evangelistas, influenciadores espirituales, líderes de ministerios independientes y predicadores de todo tipo enseñarán a propósito una versión falsa del cristianismo.

Ellos pueden enseñar que Jesús no es Dios, que Jesús es un ser creado, que Satanás no es real, que el Espíritu Santo es solo una ‘fuerza’, que la Trinidad es falsa, que vas directo al cielo cuando mueres, que el infierno es un lugar real, que todas las religiones llevan a la salvación, que el séptimo día Sábado no es importante, que el pecado no es realmente tan malo, que todo el mundo se salvará, que la santificación sin pecado es posible, que la teología de la jefatura masculina es bíblica, que necesitaremos estar sin mediador al final de los tiempos, que el Espíritu Santo abandonará a los cristianos en las últimas horas de la historia de la tierra, y que Jesús no regresará hasta que una última generación sea perfecta y deje de pecar.

Hay un sin fin de herejías que podrían incluirse en esta lista, pero por diabólicas que sean, esa no es la parte que da miedo. La parte aterradora es que el sistema babilónico, anti-Dios, anti-Cristo, anti-Evangelio dictará quién puede enseñar religión y predicar su falso evangelio, y silenciará a cualquiera con un punto de vista alternativo. Cuando esto suceda, ciertamente será un reto ser un verdadero seguidor de Jesús en un mundo que se opone a Él y a Su mensaje.

Pero tal vez no necesitemos esperar al futuro para experimentar cómo serán los acontecimientos de Apocalipsis 18. Tal vez ya estén aquí. Tal vez ya están aquí.

¿Un falso evangelio adventista?

Dondequiera que usted viva, no tiene que buscar mucho para oír las herejías enumeradas arriba proclamadas en libros, YouTube y los medios sociales-incluso de algunos ministerios independientes que “apoyan” y que se llaman a sí mismos adventistas. Mientras millones de dólares de diezmos y ofrendas fluyen a las cuentas bancarias de los ministerios, los adventistas están apoyando la proclamación de un evangelio falso.

Considere los muchos pastores que han dejado el ministerio a lo largo de los años debido a la miseria interminable causada por los que financian y apoyan mensajes divisivos. Añada a esto algunos administradores de iglesias que han aplastado a aquellos con opiniones divergentes y menospreciado a aquellos con ideas diferentes.

El espíritu de Babilonia está vivo en todo el mundo, y en lugar de rechazarlo y predicar con valentía el verdadero evangelio en nuestras iglesias, nos hemos estado preocupando por una sociedad sin dinero en efectivo y tarjetas de crédito que no funcionan. El diablo debe estar riéndose de habernos engañado tan fácilmente durante tanto tiempo.

¿Cuál es la solución a la situación en la que nos encontramos? He aquí mi desafío a todos los que predican desde un púlpito adventista, enseñan en una escuela adventista o dirigen la iglesia adventista en todas sus organizaciones.

1. Pasa tiempo con Jesús (Apocalipsis 14:6-7). No puedes compartir Su mensaje si no lo conoces personalmente.
2. Conoce lo que Jesús enseña y sigue lo que Él dice (Apocalipsis 14:8). Babilonia no va a dejar de predicar su falso evangelio, así que asegúrate de saber lo que dice el verdadero evangelio y encuentra las formas más amorosas y compasivas de compartirlo.
3. Confía en Jesús (Apocalipsis 14:9-12). Deja que Su fe cubra tu fe, deja que Sus obras cubran tus obras, deja que Su vida cubra tu vida, y entonces regocíjate en la experiencia de la salvación.

Cuando hagas esto, Jesús brillará a través de ti como una luz en la colina, y cuando el evangelio de Babilonia esté siendo comprado y vendido a tu alrededor, tendrás algo infinitamente más valioso que ninguna cantidad de dinero puede comprar: podrás llamar a Jesús tu Salvador personal y amigo.

Esta es la manera de sobrevivir a la marca de la bestia.

Jared Martin es el pastor principal de la iglesia adventista Coastlife de Queensland (Australia).

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