Acoso laboral en la Universidad de Montemorelos
La situación laboral de los pastores en la División Interamericana sigue siendo precaria y el despotismo de los administradores se cobra los puestos de los pastores. Según trascendió ahora en la Iglesia de la Universidad de Montemorelos, con la reciente salida del pastor Francisco Soto, miembro del equipo pastoral de la Universidad en México. Después de 20 años de servicio pastoral en tres Asociaciones y 5 distritos.
Soto quien realizaba un extraordinario trabajo pastoral en la Universidad de Montemorelos, y apoyado por el Rector, Ismael Castillo, termino sus relaciones laborales en la organización adventista después de una serie de anomalías, acoso que incluyo maltratos y abusos por parte de la administración de la Unión Mexicana del Norte, dirigida con mano dura por el pastor Luis Arturo King, presidente. Y valiéndose de la Asociación del Noreste.
Todo habría comenzado el 22 de julio del 2022, con el cambio de administración en la Asociación del Noreste Mexicano. El presidente se comunicó con el pastor principal de la Universidad de Montemorelos para comunicar que el pastor Soto sería cambiado, alegando falsos rumores de supuesto proceso de divorcio entre Soto y su esposa, algo que fue desmentido por la propia familia pastoral. Debido a que las maniobras de los administradores no surten efecto, y menos porque Ismael Castillo, rector de la UM no acepta los rumores, decidiendo inicialmente resaltar el trabajo de Soto.
Como es habitual en la División Interamericana, los administradores se valen de tácticas de acoso sistemático y presiones, que buscan detonar a los pastores para “justificar” las falsas narrativas ad hominen. A Francisco Soto se le impuso un blanco de 90 bautismos, algo fuera de lógica ya que la UM no tiene un territorio para evangelizar fuera de sus instalaciones. Sin embargo, en mayo de 2023, Soto sobrepaso el blanco. Dada su ardua labor y consejerías.
La administración de la Unión Mexicana del Norte comenzó a presionar a Soto, para que entregará los números telefónicos y datos de las personas que él daba consejería, para comunicarse con estas y verificar que “supuestamente estuviera trabajando”. Soto se negó a tal pedido ya que es un delito federal en México revelar los datos de personas que se atienden en consejería con pastores, orientadores y personal de la salud. Mientras todo esto sucedía, el pastor Luis Arturo King le decía a Francisco Soto que él estaba haciendo todo esto “porque lo quería proteger”.
Pero a medida que las tácticas no funcionaban, las presiones aumentaron contra Soto y su familia. En agosto del 2022, Gamaliel Torres, presidente y David Reyes, secretario de la ANM levantaron acusaciones contra Soto, alegando que era “prepotente” y que era “deshonesto” por no gastarse la ayuda económica destinada para gasolina. Ismael Castillo, rector de la UM volvió a defender a Soto, ya que esas acusaciones no eran motivos para sacarlo de pastor de la Iglesia Universitaria. En septiembre, Luis Arturo King vuelve a repetir las mismas acusaciones.
En octubre de 2022, los administradores comienzan a restringir las ayudas económicas aprobadas para todos los pastores. Vacían la ayuda de gasolina a Soto, no depositan la ayuda escolar para su hijo y en noviembre la UMN toma un voto para quitarlo de pastor de la Iglesia Universitaria. Ismael Castillo interviene, y pone a prueba al pastor Soto hasta febrero. Mientras los acosos continúan.
A inicios de 2023, le niegan a Soto su solicitud de vacaciones, que introdujo para cuidar a su esposa que había salido de una cirugía. En febrero los administradores se niegan a responder las solicitudes y ayudas ya votadas por Juntas para el doctorado que estaba haciendo Soto en el Seminario Teológico Interamericano. Pero el dinero se lo dan al secretario de la ANM, para viajar a Tierra Santa, sin que esté haciendo doctorado.
En marzo de 2023, citan al pastor Soto para decirle que a partir de 1 de junio ya no sería más pastor de la Iglesia Universitaria. Pero tanto la UMN como la ANM no entregan el traslado a Soto, como establecen los reglamentos. Sino que recibe un email de la Asociación Regiomontana notificándole el cambio. Y en mayo los administradores se niegan a darle por escrito su traslado y los motivos, tampoco aprueban sus vacaciones y ordenan a las secretarias no recibir o firmar cualquier documento al pastor Soto.
Esta situación deriva en un despido indirecto contra el pastor Francisco Soto, quien decide demandar a la organización adventista, por acoso laboral y por impago de 20 años de seguridad social. ¿Qué significa esto? La organización adventista para evitar el pago y eludir las responsabilidades fiscales, presenta a los pastores como “contratistas” y no como “empleados”, para evitar los pagos al Instituto Mexicano de la Seguridad Social. Es decir, los pastores son pasados como autónomos.
Hay suficiente evidencia de parte de Soto, para vindicar sus derechos laborales. Ya que son 20 años que no recibió prestaciones y menos su cotización del seguro, para su jubilación. Algo común en la División Interamericana, con ambientes laborales poco seguros. Solo 2 de sus 22 Uniones pagan la seguridad social y están en armonía con las leyes del trabajador. Lamentablemente, los niveles de maltrato y abuso en Interamericana, junto a la corrupción y despotismo sigue cobrando el trabajo de pastores como Soto.
Al momento sigue el proceso judicial, el único mecanismo posible para que la organización adventista tenga ética, respeto y cuidado hacia los trabajadores. Parece que los principios bíblicos no tienen validez para un gran número de administradores adventistas en los diferentes niveles de la organización adventista. En la conciliación laboral, la Asociación del Noreste Mexicano se negó a conciliar con el pastor Francisco Soto, dando vía libre para un juicio, que logrará crear precedentes para futuras acciones legales.
Es tiempo que los pastores y empleados adventistas en la División Interamericana se unan y comiencen a reclamar sus derechos laborales, en la misma forma que hicieron pastores en los Estados Unidos obligando a la organización en esa región a regirse por las leyes federales.
