El marcapasos más pequeño revoluciona la atención pediátrica en Perú
La Clínica Adventista Good Hope (CAGH) ha pasado a la historia de la medicina por implantar el primer marcapasos sin cables, y el más pequeño, directamente en el corazón de una niña de nueve años. El Dr. Victor Fontinier, especialista en electrofisiología y cardiología intervencionista, y el Dr. Miguel Leal, electrofisiólogo cardíaco y director de electrofisiología de Emory Healthcare, fueron los especialistas que lideraron la innovación quirúrgica.
Sudamérica nunca había tenido esta innovación médica para un paciente pediátrico, sentando un nuevo precedente para la atención médica. Según un artículo de Adventist News Network (ANN) un marcapasos sin cables que además es el más pequeño del mundo, es un fenómeno médico:
«Considerado una maravilla de la medicina moderna, el marcapasos más pequeño del mundo sólo mide 2,5 cm de largo y 1 cm de diámetro; esta avanzada tecnología permite regular el ritmo cardíaco de forma eficaz y durante un largo periodo, garantizando un funcionamiento óptimo y continuo del corazón.»
Más de 10 especialistas en cardiología pediátrica, UCI pediátrica, ingeniería biomédica, anestesiólogos, enfermeras, técnicos y tecnólogos colaboraron para desarrollar el producto y el procedimiento quirúrgico. Con los expertos liderando el proceso, la existencia de este marcapasos ha cambiado el panorama de la atención pediátrica, especialmente en Sudamérica, permitiendo procedimientos más seguros y menos invasivos que pueden mejorar la recuperación y la calidad de vida.
Como parte de la Red Médica Adventista del Perú, la Clínica Adventista Buena Esperanza se enorgulleció de adoptar una tecnología que puede beneficiar a la próxima generación de pacientes y cuidadores pediátricos.