Mujeres evangelistas animan a la comunidad con ministerios de ayuda
Un grupo de mujeres adventistas de la Iglesia Adventista del Sur de Nairobi, conocido como Sisterhood, está redefiniendo lo que significa crear y construir una comunidad entre mujeres.
Sus métodos son aparentemente sencillos. Dos veces al año, un miembro del grupo se ofrece como voluntaria a alguna de sus hermanas adventistas, que acoge al grupo en su casa y cuya iglesia acoge al grupo el sábado. La expedición más reciente de Sisterhood les llevó a la iglesia adventista de Kyumbi Plainview, en Machakos, en la Asociación de Nairobi Oriental (Kenia), donde evangelizaron durante tres días.
Tras una visita para sondear las necesidades de la comunidad, idearon un programa que comenzaba el viernes por la mañana temprano en la escue
la local, la escuela primaria de Kiasa.
El programa de la iglesia coincidió con una ceremonia de plantación de árboles organizada por el líder de la zona, Francis Kavyu, y el Instituto de Investigación Forestal de Kenia. Las mujeres ayudaron a la escuela y a la comunidad a plantar árboles, para después pasar a un programa de concienciación sexual reproductiva para los niños.
Padres e hijos
«Nos apasionan los niños», afirma Esther Momanyi, vicepresidenta de Sisterhood. “Ideamos un programa para hablar a los niños sobre entornos seguros y sobre cuándo y a quién hablar si alguna vez se sienten incómodos con alguien o con algo. Involucramos a profesionales y nos sometimos a una intensa formación para poder ocuparnos de la educación de los niños como es debido”.
Además, como en la jornada de plantación de árboles participaban los padres, el grupo enseñó a los padres a cuidar de los niños y a escuchar, prestar atención y actuar cuando sus hijos intentan explicar que se sienten incómodos.
El grupo invitó a los padres y a los niños a asistir a los servicios del sábado en la Iglesia Adventista de Kyumbi Plainsview una vez terminado el programa, invitación que la mayoría de los niños de la iglesia honraron con las bendiciones de sus padres.
“Fue un honor que muchos de nuestros invitados fueran niños. Nuestra iglesia nunca había tenido tantos invitados, y que tantos de ellos fueran niños de nuestra propia comunidad y padres de aquí también fue muy bonito”, dijo un miembro de Kyumbi Plainsview.
El grupo se encargó del servicio del sábado, dirigiendo el estudio de la Biblia para todos los grupos de edad y dirigiendo el servicio divino. Tanto los miembros de la iglesia como los de la comunidad fueron invi
tados a almorzar en la plaza pública de la zona, a lo que siguió una pequeña cruzada vespertina y oraciones.
Más tarde, donaron ropa y alimentos secos a miembros de la comunidad necesitados, así como libros adventistas y libros de himnos a la iglesia Kyumbi Plainsview para la comunidad.
«Parte de nuestra misión es ayudar a los que podemos de cualquier manera», dijo un miembro de la Sisterhood.
«Significó mucho para la comunidad», dijo un miembro de Kyumbi Plainsview. «La ropa y los alimentos fueron apreciados, pero es el hecho de que la iglesia pensara en ellos y no viniera con las manos vacías lo que se está quedando con la gente de la comunidad en este momento.»
Evangelismo
El domingo, el grupo realizó evangelismo puerta a puerta a la comunidad, quienes se mostraron receptivos debido a la cercanía, humildad y servicio que Sisterhood tuvo con ellos y sus hijos durante todo el tiempo que el grupo estuvo en la comunidad.
La misión dominical también implicó que el grupo visitara otras iglesias y orara con ellas y sus miembros antes de regresar a casa el domingo por la tarde.
El grupo comenzó como una forma de dar a las mujeres adventistas de la comunidad de la Iglesia Adventista del Sur de Nairobi fuera de la estructura familiar.
“Al principio, la hermandad empezó como una forma de reunirnos y apoyarnos mutuamente en momentos de pérdidas. Luego nos convertimos en un grupo que se reunía para apoyarse mutuamente en acontecimientos de la vida, como baby showers y reuniones. Ahora somos una misión evangelizadora”, afirma la vicepresidenta.
Aparte de eso, el grupo pretende ser una experiencia de unión tanto para las mujeres del grupo como para las mujeres de la iglesia organizadora, que se unen para cubrir las necesidades domésticas de la anfitriona, ya que el grupo de mujeres adventistas de la iglesia de acogida es el grupo de la iglesia que hospeda a Sisterhood.
“Aproximadamente la mitad de los niños a los que invitaban a la iglesia entonces siguen yendo a la iglesia. Los padres confían en que la iglesia cuidará de sus hijos, sobre todo porque Sisterhood se ha ganado su confianza. Es un honor. Nos tomamos muy en serio la responsabilidad de guiar a estos niños hacia una vida cristiana adventista”, afirma un anciano de la Iglesia Adventista de Kyumbi Plainsview.
Por encima de todo, el grupo ha hecho y conseguido lo que muchos grupos podrían aprender: han encontrado la manera de unirse y difundir la palabra de Dios. Han atraído a la gente a la iglesia y les han mostrado que se puede encontrar algo bueno en la Iglesia Adventista y en la Palabra de Dios.
Lynn Nyaera escribe desde Kenya.
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