¿A dónde vas?: El caso Conrad Vine
El pastor adventista Conrad Vine, hizo una serie de declaraciones que causaron alboroto en las filas adventistas, particularmente en América del Norte, aunque tarde o temprano tendrán su impacto en Latino América y el Caribe.
El pastor Vine es conocido por su postura crítica hacia la posición y el manejo de la Iglesia Adventista con respecto a la vacunación, y la pandemia del COVID -19.
Ha expresado en sus predicaciones, que durante el COVID -19, hubo violaciones a la primera enmienda (libertad religiosa); iglesias cerradas y/o prohibidas; limitaciones en la asistencia a los cultos y a la evangelización, justificado por un estado de emergencia. El Estado utilizó la fuerza para implantar su política salubrista en la pandemia, gobernando por orden ejecutiva, lo que fue aceptado por la IASD.
En la Reunión Campestre del Norte de Maine, del 13 al 17 de agosto de 2024, continuó amonestando a la Iglesia por haberse transformado “en una Iglesia que le interesan más los fondos y los subsidios federales para las instituciones de la Iglesia, y ser una Iglesia del régimen.”
Enmarcó sus conclusiones en la teoría de que, durante la pandemia, la IASD propagó las mentiras oficiales del gobierno, buscando la financiación federal. La IASD no defendió la libertad religiosa de sus miembros y aceptó las mentiras.
Para el Pastor Vine, esto fue una acción ilegitima de la Iglesia, para preservar sus fuentes de ingreso, que causó daño a sus miembros, a los propios trabajadores de la IASD, que rechazaban la vacunación.
Alegó que la declaración de la Conferencia General de Octubre del 2021, expresando
“que las reclamaciones de libertad religiosa, no se utilizan adecuadamente para oponerse a los mandatos del Gobierno o a programas de los empleadores (patronos) diseñados para proteger la salud y la seguridad de sus comunidades, “traicionaron la confianza de los miembros de la IASD. Sentenciando que “los Administradores que suscribieron esa declaración deberían renunciar”. “La IASD debe compensar económicamente a las víctimas de la Declaración del 2021.”
El Pastor Vine mencionó, que “los instrumentos de persecución (iniciados en la pandemia) están presentes hoy, y van a volverse contra el pueblo de Dios: “vivimos un rechazo a la herencia judeocristiana” (parecería estar de acuerdo con Donald Trump); “una demonización de los que disienten de la narrativa dominante; “hay tecnología que escucha espía y rastrea nuestras conversaciones; “las libertades civiles de los adventistas, particularmente los derechos constitucionales y la libertad religiosa serán revocadas”.
Ante ese cuadro aterrador, el pastor Vine llama la atención al adventismo para que se prepare ante la colocación de la marca de la bestia y la persecución, otorgando un rol protagónico a los ancianos y a los pastores.
En ese contexto, Vine, diagnóstica que hay una separación en la Iglesia y hace una propuesta.
Los dos tipos de adventistas en la IASD
- Los que han puesto su confianza en la organización, más que en la palabra de Dios; una jerarquía local que apoya a un gobierno sin Dios, un adventismo que se identifica con el Marxismo Cultural (vuelve de nuevo a coincidir con Donald Trump); fieles a la financiación federal para que las instituciones adventistas continúen existiendo.
- Otros que, ante la revocación de las libertades civiles de los adventistas, particularmente los derechos constitucionales y la libertad religiosa, (como sucedió durante la pandemia) que ante el cierre de las iglesias y todas las instituciones adventistas; ante la incapacidad de comprar, vender., viajar, se irían al clandestinaje a través de una red de hogares, a predicar el mensaje cristiano (adventista, fieles al evangelio y a la verdad Bíblica.
La Propuesta: La creación de un movimiento paralelo
El pastor Vine sugirió que si la Asociación General apoya futuros decretos de vacunación (de la Organización Mundial de la Salud o directrices relacionadas con cambio climático, apoyados por el Papado), que anulan las conciencias de los miembros de la IASD, como ha sucedido, se tiene el derecho de establecer un movimiento paralelo: una (organización paralela dentro de la Iglesia), que sustituiría a la jerarquía innecesaria de la Asociación General.
Así esa nueva Asociación de Laicos en la División Norteamericana recogería el diezmo y lo asignarían a las Asociaciones fieles a las Escrituras, que están predicando el mensaje (adventista); defendiendo la libertad religiosa de sus miembros, y las que están “contendiendo por la fe adventista contra el Marxismo Cultural, y la ideología de género.
Ante esa realidad, el pastor Vine llama la atención al adventismo para que se prepare ante la colocación de la marca de la bestia y la persecución, porque cuando llegue ese momento, las conferencias no podrán emplear pastores, maestros y recibir los diezmos y las ofrendas.
Las reacciones de los liberales, los conservadores y la “jerarquía institucional”
Los adventistas liberales – progresistas son escépticos hacia el pastor Vine. Se preguntan: si el pastor Vine es una especie de David Koresh, predicador, líder adventista y autoproclamado profeta con mente sectaria. ¿Sera un “conspiranoico”? ¿Estará dirigido por el Espíritu Santo? ¿El carácter de Cristo y el fruto del Espíritu estarán en él? ¿Sera un anticristo?
Los conservadores y fundamentalistas de América Latina se han identificado más, con su mensaje, expresando en las redes que acogerían su propuesta.
Sin embargo, los “jerarcas legales” (palabras del pastor Vine) han encendido las hogueras y la censura, motivando una amonestación de la Asociación del Norte de Nueva Inglaterra y la cancelación de las presentaciones del pastor Vine en eventos a los cuales se proponía asistir, entre ellas una participación en el Ministerio Secrets Unsealed.
Conclusión
Descentralizar la recolección de los diezmos, afectaría las recaudaciones y puede tener un efecto en toda la estructura organizativa de la Iglesia local y mundial. Incluso puede tener consecuencias en las prácticas de inversión financiera que ayudan a conservar las responsabilidades fiduciarias de administrar el patrimonio de la Iglesia Adventista
La postura del pastor Vine, de que los diezmos se canalicen a través de laicos y los criterios que exige para recibirlos, abre la puerta a que sectores liberales -progresistas dentro de la Iglesia, hagan exactamente lo mismo, lo que crearía un problema, porque afectaría la administración de los recursos económicos, en una Iglesia que con los años se ha transformado en una empresa corporativa.
El pastor Vine quiere crear las condiciones para zarandear la Iglesia de todos aquellos sectores, que a su juicio no son fieles a las doctrinas y/o al mensaje adventista pero el resultado es similar al de “pegarse uno mismo un tiro en el pie”. Es provocar una guerra interna, un cisma en la Iglesia, en la que irónicamente el será zarandeado.
¡Quo vadis Pastor Vine! ¿Adónde vas?
Edison Garcia-Creitoff enseñó ética y comunicación durante 15 años en diferentes universidades de Puerto Rico. Es Trabajador Social, Mediador de Conflictos, abogado (J.D.) capellán laico y Coach Motivacional -Espiritual.